Dieta vegana y el corazón

Dieta vegana y corazón

Estudiar el efecto de una dieta vegana y el corazón es un reto. Ya que es difícil medir el efecto de una dieta. Ya que los alimentos poseen muchos compuestos activos que podrían ser los responsables de los resultados. Un grupo de investigadores Americanos han aceptado el reto.

Su propuesta es usar una molécula circulante en sangre cuyos niveles describen el grado de inflación de un individuo. Esta molécula es la proteína C reactiva de alta sensibilidad (PCRas). Es un marcador de riesgo que indica enfermedad arterial coronaria.

El objetivo es muy ambicioso, ya que los investigadores se proponen comparar una dieta vegana frente a la dieta recomendada por la Asociación Americana del Corazon y ver los cambios en los niveles de proteína C reactiva de alta sensibilidad como marcador indirecto de daño coronario.

Para ello han realizado un estudio prospectivo, randomizado.

Es un estudio con un 8 semanas de seguimiento para observar el efecto de ambas dietas sobre los niveles de PCRas en pacientes con enfermedad coronaria.

Resultados dieta vegana frente dieta de la Asociación Americana del Corazon

La dieta vegana consiguió disminuir los niveles de PCRas en un 32%. Además este resultado fue estadísticamente significativo comparado con la dieta recomendada por la Asociación Americana del Corazon.

La dieta vegana disminuye la inflamación y con ello el riesgo de eventos en pacientes con enfermedad coronaria.

J Am Heart Assoc. 2018 Dec 4;7(23):e011367

En los pacientes con arteriopatía coronaria que reciben tratamiento médico dirigido por las guías, se puede considerar la prescripción de una dieta vegana para reducir la proteína C reactiva de alta sensibilidad como marcador de riesgo de resultados adversos.

La Asociación Americana del corazón a puesto a prueba la dieta vegana versus la dieta que ellos recomiendan para sus pacientes con enfermedad coronaria. La principal diferencia entre ambas dietas es el consumo o no de proteínas de origen animal.

Aunque los niveles de PCR-as se intentan controlar con medicación antiinflamatoria, un 45% de los pacientes siguen con la PCR-as elevada a pesar de la medicación con el riesgo cardiovascular que ello conlleva. Es por ello que los investigadores buscan otras estrategias para disminuir la PCR-as enfocándose en el estilo de vida y una dieta saludable.