Consumir fruta y cáncer de mama

Este estudio analiza la relación entre consumir fruta y cáncer de mama. Analizando especialmente el consumo de frutas y vegetales durante la adolescencia.

Sabemos que tanto las frutas como los vegetales son fuentes de fibra, antioxidantes, minerales, vitaminas y otros substancias necesarias para el organismo. Algunas de estas substancias, según otros estudios, tienen el potencial de influir/afectar al desarrollo del cáncer de mama. Por ello existe mucho interés en estudiar su consumo y el riesgo de cáncer de mama.

En la actualidad el cáncer de mama es el cáncer mas diagnosticado en el mundo. Es muy importante entender cómo disminuir el riesgo de padecerlo. En España en el 2020 se diagnosticaron más de 34.000 casos. Una de cada 8 mujeres será diagnosticada de cáncer de mama a lo largo de su vida.

Este estudio prospectivo, de cohortes, en el que participaron 90.476 mujeres premenopausicas de entre 27 y 44 años. Seguidas entre 1991 y el 2013. Al final evaluaron 44233 mujeres de las cuales disponían datos de consumo de vegetales y fruta durante su adolescencia desde el 1998 al 2013. Durante los 22 años de seguimiento 3.235 mujeres desarrollaron cáncer mama.

Resultados

El mayor consumo de frutas y verduras durante la adolescencia se asoció con un menor riego de desarrollar cáncer de mama. Comparando el grupo con mayor consumo con el de menor consumo, se observo una reducción del 25% en el riesgo de desarrollar cáncer de mama.

Los autores concluyen que este estudio aporta la evidencia de que un mayor consumo de frutas durante la adolescencia se asocia con una disminución en el riesgo de padecer cáncer de mama. Por lo que la elección de los alimentos en la adolescencia puede ser de gran relevancia.

Ref: BMJ 2016;353:i2343

Además el mayor consumo de vegetales ricos en 𝛂-carotenos (Ejem: calabaza, plátanos, tomates, zanahorias) al inicio de la edad adulta se asocia especialmente con un riesgo menor de cáncer de mama.

Se ha observado que el consumo total de fruta durante la adolescencia se asocia a un menor riesgo de cáncer de mama.

Un mayor consumo de fruta y vegetales ricos en alfa-carotenos en la edad adulta temprana también se asocia con un menor riesgo de cáncer de mama.

La disminución del riesgo de cáncer de mama es diferente según el tipo de fruta y verdura. La manzana, la naranja, el plátano, la uva y la col rizada se asociaron significativamente con la reducción de riesgo